Así monto yo una receta

Quien me conoce sabe lo mucho que me gusta trastear en la cocina, probar cosas nuevas y otras no tanto, como esas recetas familiares de toda la vida que de vez en cuando gusta volver a hacer. No se me suele dar mal, y rara vez he tenido que tirar algo que haya cocinado, y cuando ha pasado, pues a aprender de los errores cometidos.

Lo que a veces me preguntan es de donde saco las recetas, y aunque la respuesta pueda parecer obvia, no lo es tanto, y voy a explicar el porqué.

Veo muy poco la tele, alguna película o serie de vez en cuando, pero lo que sí veo a diario es el Canal Cocina. Cuando en algún programa o por internet aparece algo que me llamada la atención, es ahí cuando empiezo a investigar. La excepción es cuando se trata de una receta familiar, que la apunto y la hago tal cual es, sin modificaciones.

Lo primero que hago es mirar recetas por internet, todas las necesarias y haciendo uso del sentido común y de los parcos conocimientos de cocina que tengo, voy filtrando hasta quedarme con una o dos recetas, las que mas me convenzan. Es bastante fácil la criba, porque te encuentras cada cosa... De esas recetas "semifinalistas" sale una, que es es normalmente la que modifico basándome en mis gustos personales, hasta formar la "receta ganadora".

De ahí, y tras tener todos los ingredientes, a la cocina!... Y aquí viene la parte graciosa, porque aun habiendo establecido una receta final, es fácil que en el momento de prepararla, me de un tornillazo de última hora y cambie, añada o quite algun ingrediente :-D

Y una cosa mas. Siempre hay que tener un papel donde ir apuntando cambios en los ingredientes, tiempos, etc. En mi caso, utilizo Evernote para guardar la receta final, con las notas que considere oportuno para tenerlas en cuenta la próxima vez.

Al final, todo se reduce a disfrutar cocinando, ponerse siempre con tiempo y ganas, porque cocinar con prisa o cabreado no es bueno ni para la receta ni para uno/a.