Aquí estoy de vuelta con otro experimento de esos que me gusta hacer de vez en cuando. En esta ocasión he preparado lo que se conoce como «Leche de Avena», que en realidad se prepara con agua, y que resulta que tiene mogollón de propiedades que lo convierten en una bebida interesante.
Es sabido por casi todos que la avena es uno de los considerados «superalimentos», y su consumo habitual tienen muchos beneficios, entre otros:
- Ayuda a la pérdida de peso, ya que al ser el cereal que mas contenido de fibra tiene, su poder saciante es muy alto.
- Alto contenido en proteínas, lo que lo hace imprescindible para todos aquellos que sigan una dieta hiperprotéica.
- La avena es muy rica en vitaminas y minerales.
- Es un alimento bajo en azúcares y grasas.
Con todo esto, la avena hay mil formas de prepararla: en galletas, batidos, tortitas, porridge (gachas), y la última que he descubierto: la leche de avena. Yo pondré dos formas que he probado, pero hay mas posibilidades. Las ventajas que le atribuyen son todas en realidad bastante importantes:
- Ayuda a adelgazar, ya que tomada en ayunas o antes de la comida o cena, nos saciará.
- Es un regulador del colesterol y de la hipertensión.
- Ayuda a limpiar los intestinos y a eliminar toxinas.
- Ayuda en la pérdida de grasa abdominal.
- Es un remedio contra el insomnio.
En fin, como se puede comprobar todo son puntos positivos, y si tenemos en cuenta que su preparación es muy sencilla y relativamente rápida, ¿por que no incluirla en nuestra dieta?. Tal y como decía, hay diferentes formas de preparar el agua de avena. Yo la he preparado de dos formas y son las que voy a explicar. La diferencia entre una y otra está en si se licua el agua con la avena, o si se saca ésta y se deja solamente el agua con la esencia de la avena.
METODO 1 - CON LICUADO
Ingredientes (para 1,5 litros / 6 vasos):
Ingredientes (para 1,5 litros / 6 vasos):
- 1 taza de copos de avena (130 gr.)
- 2 tazas de agua + 4 tazas de agua
- Edulcorante
- Canela
Preparación:
En un vaso de batidora grande ponemos las dos tazas de agua y los copos de avena. Ni que decir tiene que los copos de avena deben ser integrales y sin ningún tipo de procesado ni añadidos. Dejamos reposar durante dos o tres horas, removiendo de vez en cuando.
Ahora le añadimos la canela y edulcorante al gusto y le metemos la batidora, procurando que quede lo mas batido posible. Colamos con un colador fino la mezcla, y guardamos la harina de avena mezclada con el agua que quede en el colador, ya que le vamos a dar un buen uso.
El líquido resultante, lo mezclamos con 4 vasos de agua, y tendremos prácticamente 1,5 litros de la famosa leche de avena. Lo guardamos al frigo y listo para tomar. Hay que acordarse de removerla bien antes de servirla.
Hasta aquí, el proceso de remojado de la avena es común para las dos recetas |
El líquido resultante, lo mezclamos con 4 vasos de agua, y tendremos prácticamente 1,5 litros de la famosa leche de avena. Lo guardamos al frigo y listo para tomar. Hay que acordarse de removerla bien antes de servirla.
El «bagazo» sobrante lo aproveché para hacer unas tortitas. Le añadí un poco de clara de huevo, edulcorante, algo mas de canela (o un poco de cacao desgrasado) y a la sartén. Este fue el resultado:
Tortitas resultantes. Una merienda perfecta junto con un poco de fruta. |
Ingredientes (para 1,5 litros / 6 vasos):
- 1 taza de copos de avena (160 gr.)
- 2 tazas de agua + 4 tazas de avena
- Edulcorante
- Canela (opcional)
Preparación:
En un vaso de batidora grande ponemos las dos tazas de agua y los copos de avena. Ni que decir tiene que los copos de avena deben ser integrales y sin ningún tipo de procesado ni añadidos. Dejamos reposar durante 24 horas, removiendo de vez en cuando.
En esta segunda receta el proceso se simplifica, ya que ahora colaremos los copos de avena y el agua usando un colador fino, pero sin batir la mezcla. Nos quedaran los copos en el colador, y cuando estén bien escurridos, los usaremos para tortitas, para tomarlos con yogur o como queramos, como en la primera receta.
Pasamos a una botella el agua de la avena, añadimos edulcorante y canela al gusto, y completamos hasta el litro y medio con aproximadamente 4 tazas mas de agua. Y al frigo. Listo para tomar.
En esta segunda receta el proceso se simplifica, ya que ahora colaremos los copos de avena y el agua usando un colador fino, pero sin batir la mezcla. Nos quedaran los copos en el colador, y cuando estén bien escurridos, los usaremos para tortitas, para tomarlos con yogur o como queramos, como en la primera receta.
Pasamos a una botella el agua de la avena, añadimos edulcorante y canela al gusto, y completamos hasta el litro y medio con aproximadamente 4 tazas mas de agua. Y al frigo. Listo para tomar.
NOTAS: Lógicamente, la receta en la que la avena va licuada tiene mas calorías que la segunda receta, en la que no licuamos y sacamos los copos para dejar solo el agua con la esencia de la avena. En ambos casos, me ha recordado a la horchata, pero con menos potencia de sabor.
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