Peli canadiense estrenada por Netflix este año y protagonizada por un grupo de personas, todas de ideas afines sobre la necesidad de estar preparados ante una posible catástrofe a nivel mundial.
El grupo decide acudir a una especie de campamento dirigido por un famoso preparacionista y youtuber que además de ofrecer sus conocimientos a través de vídeos de la conocida plataforma, ahora quiere transmitir su experiencia en un entorno real.
La película en si no está mal, ya que muchas de las cosas que explican son reales, y de hecho, la comunidad prepper es muy amplia tanto en EEUU como en Canadá. Es más, existe un programa llamado «Doomsday Preppers», que viene a ser una mezcla entre un documental y un reality, donde una serie preppers americanos dan a conocer sus planes (alimentación, rapidez de respuesta, instalaciones, etc.) en caso de producirse alguna catástrofe, y un experto los califica en función de la perfección o de los fallos de dicho plan
Ahí va el trailer:
El grupo se reúne en la casa de Alain, el famoso youtuber, que tiene montado su base en mitad de un bosque nevado. Una infraestructura totalmente auto suficiente, lugar al que todos los participantes son trasladados con los ojos tapados para evitar que conozcan su ubicación exacta.
Al principio todo va bien, y se van desarrollando las diferentes actividades programadas por Alain, hasta que debido a un error, uno de los participantes muere tras explotarle una carga explosiva.
A partir de aquí, las cosas se tuercen, ya que mientras unos quieren notificar el accidente a la policía, Alain, apoyado por otro participante, prefieren ocultarlo, el primero por miedo a perder el trabajo de años para construir su base, y el segundo por miedo a la cárcel.
Al final, tras una persecución a través de parajes nevados, el escenario se convierte en una especie de Vietnam, donde solo quedará un superviviente.
La idea no está mal, pero al final es la historia de siempre: un grupo en desacuerdo, que en lugar de terminar de una forma medianamente civilizada, acaban por convertirse en enemigos, unos luchando por sobrevivir, y otros, por quitar de en medio al resto.
Lo mas curioso de todo es como al final ningún cataclismo termina con ellos, sino que son ellos mismos los causantes de su fin.
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