Hace un montón de años, viviendo en Lanzarote, compramos una manga para hacer churros, y 10 años después, ahí sigue, como el primer día :). Así que voy a explicar como los hago yo, ya que se trata de una receta facilísima y bastante rápida. Y que mejor merienda para una tarde de invierno, o desayuno para empezar un domingo con buen pie!
Ingredientes ( personas):
- 250 gr. Harina de trigo
- 250 c.c. de agua
- 1 cc de sal
Preparación:
Ponemos el agua a hervir, y en el momento que empiece, echamos la sal, removemos y apartamos del fuego.
En un bol, ponemos la harina, y echamos el agua encima, que está recién apartada del fuego. Con una cuchara de palo vamos mezclando. Se pondrá bastante espesa, pero con paciencia la vamos mezclando hasta que no queden restos de harina.
Llenamos la manga con la masa, y ponemos una boquilla con forma de estrella. Aquí he de decir que en algunos sitios he visto que recomiendan el uso de una bolsa de plástico si no se dispone de una manga, pero os aviso que tendréis que buscar una bolsa muy fuerte, porque la masa es bastante compacta.
Ponemos aceite de girasol a fuego fuerte, y antes de que empiece a humear, lo bajamos un poco, y empezamos a soltar la masa. Siendo hábil, se le puede dar la forma típica, pero sinceramente, es complicado por que el aceite quema, así que yo al final he optado por darles forma alargada y listo.
En un bol, ponemos la harina, y echamos el agua encima, que está recién apartada del fuego. Con una cuchara de palo vamos mezclando. Se pondrá bastante espesa, pero con paciencia la vamos mezclando hasta que no queden restos de harina.
Llenamos la manga con la masa, y ponemos una boquilla con forma de estrella. Aquí he de decir que en algunos sitios he visto que recomiendan el uso de una bolsa de plástico si no se dispone de una manga, pero os aviso que tendréis que buscar una bolsa muy fuerte, porque la masa es bastante compacta.
Ponemos aceite de girasol a fuego fuerte, y antes de que empiece a humear, lo bajamos un poco, y empezamos a soltar la masa. Siendo hábil, se le puede dar la forma típica, pero sinceramente, es complicado por que el aceite quema, así que yo al final he optado por darles forma alargada y listo.
Darles la vuelta, estando atentos a que no se quemen, y vamos sacando a una fuente con papel absorbente. Espolvoreamos con azúcar conforme van saliendo y listos. A comerrrrr!
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